Antonello Gerbi

Antonello Gerbi nació en Florencia en 1904 en el seno de una familia judía muy conocida en la escena antifascista. Desde muy joven se destacó por la versatilidad de sus intereses, del periodismo al cine pasando por la fotografía.

Fue becario de la Fundación Rockefeller y, entre 1929 y 1931, tuvo una intensa experiencia internacional de investigación en años cruciales de la historia del siglo XX, con estancias en varios países europeos, como Alemania, Gran Bretaña y Austria. En 1932, fue contratado por la Banca Commerciale Italiana como jefe del Departamento de Investigación.

En 1938, con la llegada de las leyes antisemitas, el director general de Comit, Raffaele Mattioli, consciente del riesgo que podía correr permaneciendo en Italia, confió a Gerbi una misión en Perú, invitándole a emigrar. Aquí tuvo que realizar un trabajo de investigación para el Banco Italiano-Lima, fundado en 1889 por un grupo de miembros de la comunidad italiana.

Embarcó en Génova en el transatlántico Rex el 19 de octubre de 1938 y durante el viaje documentó

el paisaje circundante con fotografías y páginas de diario. La primera parada de su viaje fue en Nueva York, donde conoció a funcionarios de banca, judíos y antifascistas italianos que habían huido al extranjero. El viaje le sirvió para conocer a miembros de la alta burguesía ítalo-peruana y a ejecutivos de empresas extranjeras en previsión de su futuro destino en Lima.

Cuando las leyes raciales se endurecieron, Gerbi fue despedido de Comit el 28 de febrero de 1939 y, gracias a su relación con el Banco Italiano - Lima y a su perfil de erudito y analista económico, logró obtener una acreditación científico-profesional en Perú.

Pronto se le unió su prometida Herma Schimmerling, que se convertiría en su esposa en 1940. Sus dos hijos también nacieron en la capital: Daniele y Alessandro.

Gerbi siguió trabajando, dividiendo su tiempo entre el análisis económico y la investigación historiográfica: redactó estudios por cuenta del banco donde trabajaba y reorientó sus intereses hacia la historia de Perú y las relaciones culturales entre Europa y el Nuevo Mundo.

Comenzó a colaborar y a mantener contacto con una serie de importantes representantes de la escena intelectual latinoamericana y, a lo largo de los años, organizó excursiones y viajes para documentar la compleja identidad de Perú a través de escritos y fotografías de entornos naturales.

En 1948 regresó a Italia, para no volver nunca más a Perú. En su tierra de origen, reanudó su actividad económica y prosiguió paralelamente sus actividades de investigación.

Hasta 1975, el año anterior a su muerte, viajó por Estados Unidos para dar una serie de conferencias en prestigiosas sedes universitarias.

Testimonio recogido en colaboración con Maria Matilde Benzoni, "De Milán a Lima: 1900-1950. Antonello Gerbi' en Milano città mondo #04. Historias de vida entre Perú e Italia, Galaad ediciones 2019, pp. 37 - 40.