Pietro Casulli

Pietro Casulli nació el 11 de enero de 1933 en Zadar, entonces italiana, ahora croata, hijo de Marino Casulli, empresario de la alimentación, y Antonia Baccarelli, hija de un constructor, ambos de Apulia. Pietro tenía  dos hermanas, una dos años mayor, Vita, y otra dos años menor, Maria Pia.

En 1937, los padres se separaron, y el padre se quedó con su hijo en Zadar; la hermana mayor se fue a estudiar a un internado en Gualdo Tadino, provincia de Perugia, y la hermana menor se fue con su madre a Bari. La situación económica de la familia le permitía llevar una vida cómoda. Pietro vive en un edificio de apartamentos a las afueras de la ciudad, construido por su padre.

Durante el verano, Marino Casulli enviaba a su hijo de vacaciones a las montañas de la provincia de Trento, a Fiera di Primiero, ya que su hermano tenía allí una casa. Cuando Italia entró en guerra en el verano de 1940, Pietro estaba de vacaciones y se quedó allí con sus tíos, mientras su padre permanecía en Zadar. Durante el conflicto, pasaron a ser refugiados. Peter asistió a la escuela primaria en el pueblo ocupado por las tropas alemanas.

Al final de la guerra y como consecuencia de los tratados internacionales de paz, Marino Casulli se trasladó a Verona, volviendo a vivir con su hijo Pietro y poco después con su hija Vita. Madura en ellos la idea de emigrar a los Estados Unidos de América para unirse a una rama de la familia que vivía allí.

En 1953, la solicitud de emigración fue aceptada gracias al pedido de reagrupación familiar de su tío. El 7 de junio se sometieron a exámenes médicos en el consulado estadounidense de Génova. El 18 de junio de 1953 llegaron al puerto de Nueva York en el buque "Saturnia", del que desembarcaron después de que las autoridades fronterizas comprobaran sus documentos. Empezaron su nueva vida estudiando y trabajando. En 1954, Pietro recibió una tarjeta postal para alistarse en el ejército estadounidense y aceptó por los muchos beneficios que le ofrecían, incluido el otorgamiento de la ciudadanía estadounidense. Al término de su servicio militar, inició su carrera profesional como dibujante técnico-mecánico.

En el verano de 1963, decidió tomarse unas vacaciones en Italia y despedirse de amigos y familiares. Viajó a Bari, donde se despidió de su madre y de su hermana Maria Pia. Intentó buscar trabajo en Italia a pesar de tener ya un billete de vuelta a Estados Unidos. Se movió entre Brescia, Milán y Turín, pero las ofertas económicas que recibía no le satisfacían. Durante su estancia en Turín, tuvo la oportunidad de pasar un fin de semana en Génova, entonces la tercera ciudad industrial de Italia, una ciudad costera con un entorno y un clima que le recordaron a Zara y un estilo de vida agradable.

Aquí decidió aceptar una oferta de trabajo y se instaló definitivamente.

Testimonio recogido en colaboración con la familia Casulli, créditos fotográficos de Pietro Casulli.