Los testimonios de guerra se narran en el Área 08, Italianos en movimiento.
Este acrónimo se utilizaba en los círculos anglosajones para definir a los militares capturados durante los conflictos, para diferenciarlos de los prisioneros civiles. En particular, este término se utilizó durante la Segunda Guerra Mundial para definir a los miles de soldados italianos y alemanes capturados por los ejércitos aliados, británicos o estadounidenses, especialmente en África, en los territorios del entonces imperio colonial italiano.
Los prisioneros capturados en África (Libia, Etiopía, Eritrea y Somalia) eran enviados a la India, Australia o Inglaterra. Se calcula que más de 18.000 prisioneros de guerra italianos fueron trasladados a Australia entre 1941 y 1945.
En India y Australia, los prisioneros de guerra fueron internados en campos de detención especiales.
En Australia, muchos soldados italianos fueron a trabajar a las enormes granjas de los colonos británicos. En algunos casos, la relación con los empresarios dio lugar a profundas relaciones humanas, más allá de las oposiciones políticas.
En 1946 comenzaron las repatriaciones, que continuaron hasta 1947. La mayoría de los soldados regresaron a Italia tras un cautiverio de hasta seis años; otros, por desgracia, murieron en los campos debido a las malas condiciones de vida, la falta de higiene, las enfermedades y la alimentación insuficiente. Algunos, una vez repatriados, decidieron regresar a Australia y continuar la vida que habían empezado allí, mientras que otros optaron por desertar y se quedaron a vivir su nueva vida en Australia.
Varias organizaciones participan en la reconstrucción de esta página de la historia italiana: entre ellas, los proyectos Italian prisoners of War y Finding Nonno, de Joanne Tapiolas, investigadora australiana de origen italiano.